2009-05-15 * Disolucion
que nos parta un rayo_rosenvinge & vegas
Que duelen las horas en la oscuridad,
que fumo diez mil cigarrillos que sé que mi voz quebrarán,
que rezo y voy dibujando en ceniza una cruz,
que súbitamente caiga un rayo y se haga la luz.....
Lo que nos hizo ser nosotros
embriagaba nuestro amor
vanidoso e invariable,
aquello tan confuso que nos invito a volar sin alas
noches precoces de agosto
recostados en la arena de la orilla
frente a la profunda calma de un oceano invisible,
todo aquello tan fascinante
que nos fundio estos 20 largos años,
absolutamente TODO era mentira,
el absurdo invento monocromatico
de mi esperanza tergiversadora y progre
me engaño con deseos y banales presunciones de inocencia marchita
lo unico que hacian
noche tras noche era,
esconder tras su breve fragilidad
la culpa y el eterno desconsuelo
con que los años dorados
fueron tallando
dia tras dia
el desequilibrio emocional
con que ahora comparto piso,
exageradas e indiferentes dosis de angustia y melancolia
grabadas con hielo en mi sien
tallaste golpe tras golpe
en mi expresion desorientada
un dolor profundo e impronunciable,
lo podia ver reflejando su crueldad
en tus dos ojos vacios
los dias que todavía me dejabas mirarte a la cara
porque después
con el cambio repentino de estacion
y la primeras nieves sobre el prado
era tu espalda
vestida
todo lo que podia ver cuando aun dormiamos juntos,
y tu voz
calida y susurrante
era un recuerdo que con el tiempo
me costaba mas y mas desempolvar
de entre los trastos viejos que habitan mi alma
acostumbrandome como estaba
al silencio maldito de tu compañía
La muerte
como un ave extraña
anida nocturna en mitad de este idilio,
y se va extendiendo irreversible
igual que un cancer
terminal
por entre los entresijos de una relacion
condenada a la imprevisivilidad frustante
de cada uno de nuestros mutuos impulsos incontrolables
bcn_sabado 16 de mayo de 2009
audio_que nos parta un rayo_C.Rosenvinge & N.Vegas